¿Será que mis profesores de inglés buscan hacerme reflexionar? ¿O en su afán de hacerme practicar disparan preguntas sin ser conscientes de su impacto?
Ayer tuve práctica de conversación con un profe nuevo. Le dije que recién llegaba a Belgrado, que todavía no había salido a recorrer porque necesitaba recuperarme del viaje, pero que había estado hace seis años y, aunque seguramente había cambiado, tenía una idea de la ciudad.
─Es verdad, una ciudad cambia en seis años ─dijo el profesor.
─Y uno también cambia. Te interesan otras experiencias, te fijás en cosas diferentes… ─respondí.
─¿Y cuánto cambiaste en estos seis años? ─preguntó.
─😳 ─fue mi única reacción.
Respondí que había cambiado mucho y di ejemplos enfocados en los viajes y lugares que visité en estos años; ahora, al haber explorado más, comparo destinos, culturas, etc. Fue una respuesta rápida aunque sabía que si escarbaba un poco, había mucho más.
Después de la clase escarbé y me encontré con que había cambiado más de lo que pensaba. Hace 6 años:
Apenas estaba empezando a trabajar online. Mis horarios seguían la zona horaria de Colombia y la mayoría de las noches trabajaba hasta tarde, a veces hasta las 3 am. Eso marcaba mi forma de viajar (y de vivir).
No era vegana. Aunque me resistía a comer animales, lo hacía en ciertas situaciones. Leer etiquetas en alfabeto cirílico no me preocupaba tanto como ahora. (Quiero aclarar que tener una alimentación basada en plantas es totalmente posible mientras viajás, en algunos lugares requiere un poco más de investigación, pero nada complicado).
No tenía canal de YouTube. Escribía en mi blog de viajes, pero viendo hacia atrás, me doy cuenta de que era muy inexperta. Creo que mejoré los artículos y ahora son más útiles para otros viajeros.
En aquel momento, Serbia era el segundo país de los Balcanes que visitaba; no conocía nada de la región, apenas empezaba a entender qué había sido la Guerra de los Balcanes, Yugoslavia y eso. Hoy en día visitar algún país de los Balcanes me genera un entusiasmo especial.
Mi inglés era espantoso, sobre todo porque no me animaba a practicarlo porque lo hablaba mal -círculo vicioso del que logré salir-. Ahora me animo a hablarlo aunque soy consciente de que cometo errores (bueno, a veces ni me doy cuenta, pero entendí que lo importante es poder comunicarme 😌).
¿Y Belgrado?
Cómo tengo mala memoria y pocos registros escritos y fotográficos, no puedo hacer una comparación con la Belgrado de hace seis años.
Lo único que puedo comparar es el Templo de San Sava, debido al impacto que me generó. Cuando entré esta vez me generó un efecto ¡wow! que no recordaba haber sentido acá.
Una sola foto en mi archivo me permitió confirmarlo. El interior todavía estaba en construcción.
Como curiosidad, es la iglesia ortodoxa más grande de los Balcanes y una de las más grandes del mundo.
Ahora me toca a mí hacer la pregunta simple y a vos responder 😄, ¿te animás a compartir conmigo algún cambio que hayas tenido en los últimos años?
Podés responder este mail o dejar tu comentario en Substack.
Pauli
De viajes y otros demonios
P. D. En la newsletter Do you feel at home in Argentina? te contaba sobre la pregunta que me hizo otra profe.
P. D. 2. Todavía no tengo listo el video de Belgrado porque me apresuré a hacer el de Zagreb en Navidad, pero en las próximas semanas lo tendré listo. Actualización: video de Belgrado publicado.
P. D. 3. Si te da curiosidad conocer los lugares más famosos de la zona, en este video podés ver el Top 15 de los Balcanes.
Uff pensandolo rápido creo que el cambio más grande fue cambiar de profesión, darme cuenta que lo que hacía no era lo que quería, a pesar de haber estudiado tantos años aquello. El otro cambio, aunque fue hace más de 6 años, fue que viajando por Centroamérica me di cuenta que no necesitaba tanta ropa, principalmente porque la mochila en la espalda me pesaba, fui dejando muchas cosas en el camino y desde entonces viajo mucho más liviana!
Muchísimos cambios, Pauli! Comparto con vos que en los últimos anos dejé de comer carne, hoy soy vegetariana. Cambié de trabajo, finalmente me empecé a ver como escritora. Dejé algunas amistades, nutrí otras. Aprendí mucho sobre el amor y la familia, así como el duelo y la frustración. Siento que cambio todo el tiempo! Creo que no somos casi nunca la misma persona